"Es una boda austera y todo lo que estamos invirtiendo son de nuestros ahorritos y la colaboración de la gente, de la familia y el aporte de algunos amigos", apuntó Fernández.
García Linera, aseguró que no existe gasto o dinero estatal porque se trata de una ceremonia particular y que la comida o aptahapi correrá por cuenta de los comunarios, las autoridades originarias y locales de Tiwanaku.
Como pareja, manifestó el Vicepresidente, que aportarán al aptahapi con el tradicional y rico ají de fideo para los invitados a la boda.
La ceremonia ancestral andino-amazónica se realizará el 8 de septiembre a las 10:00, en Tiwanaku, la antigua capital de la civilización preincaica.
La unión de la pareja se desarrollará en el Museo Arqueológico para luego hacer un paseo y posterior fiesta en la plaza central de esa comunidad, a 70 km de La Paz y 10km de las orillas del lago Titicaca.
Un día después, el 9 de septiembre, se celebrará la ceremonia católica prevista para las 15:00 en la Basílica de San Francisco, para que luego de unas horas cumplan con la unión por lo civil en un domicilio particular.
Para la boda andino-amazónica invitaron al vicepresidente de Argentina y su novia, presidentes de países latinoamericanos, a las autoridades nacionales, departamentales, familiares, amigos y amistades de la pareja.
Fernández expresó su felicidad de que el Consejo de Amautas y el Alcalde de Tiwanaku les hayan invitado a contraer nupcias en ese sagrado lugar lleno de energías espirituales para que sean protegidos.
Para el efecto, develó que en una de las comunidades de Tiwanaku le están confeccionado un vestuario acorde a la tradición andino-amazónica que será una sorpresa.
El Vicepresidente acotó que el traje será una versión estilizada del mundo andino adecuada al siglo XXI y en cuanto a su persona existirá un cambio sobrio.
La periodista expresó su deseo de tener dos hijos y el Vicepresidente una niña, aunque remarcó que lo que venga será una bendición.
García Linera comentó que habrá cambios en su departamento para acoger a su futura esposa, para lo cual "relocalizará" algunos libros y así acondicionar varios muebles para Claudia.
También comentó que respetará todas las decisiones de su futura esposa como aquella de seguir ejerciendo el periodismo.
Entretanto, Fernández, éticamente hablando, expresó que su noviazgo como su matrimonio no afectará a su carrera, porque realiza un trabajo periodístico imparcial, como tampoco interferirá en la labor que cumple García Linera como el segundo hombre que dirige los destinos del país.
Añadió que desde el cargo de periodista que ejerce hará obras sociales como lo hacen las esposas de los vicepresidentes. "Periodista hasta el final", dijo Fernández quien garantizó que nunca tergiversó, manipuló o perjudicó a alguien en su labor.
ABI
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