El vicepresidente Álvaro García Linera presentó ayer su libro “Forma valor y forma comunidad”, junto a Antonio Negri, quien presentó su texto “El valor constituyente”, en el auditorio de la Universidad Raval, de Barcelona.
En el evento, los oyentes quedaron atónitos por su relato de cómo cayó preso en 1992, y con él, su ex pareja, por difundir sus ideas de justicia, equidad social y respeto a la población indígena-campesina de Bolivia.
“Este libro ha nacido como un grito de amor, como una carta clandestina que se burla del terror, que se ríe de los barrotes para decirles a los de afuera estoy vivo, que me derrotaron hoy, pero no para siempre, pues aún estoy vivo”, afirmó García Linera.
También indicó que en este texto se refleja toda la emotividad convertida “en razón, en lógica y en estrategia”, que le dejó la experiencia de ser detenido, torturado y saber que su entonces pareja corría la misma suerte.
“Este libro es un gesto de libertad, es una ansia desesperada de volar por encima de las torretas artilladas, por debajo de las bardas electrificadas por el centro de los infinitos y malditos barrotes de acero que te gritan a cada instante que no saldrás libre nunca”, describió.
Añadió que “es una añoranza de un amor distante, torturado y encerrado. Es una búsqueda subliminada de una caricia y de una voz en el hombro que te diga, como lo había dicho mil veces antes, que siga adelante”.
Luego se refirió a que vivió la derrota de la tradicional izquierda boliviana que dio paso a 20 años del neoliberalismo, también la caída del muro de Berlín, “a mis 29 años, la infame conversión de socialistas en mediocres tecnócratas liberales y a los 30 me tocó la tortura, la cárcel y la derrota política”, agregó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario